miércoles, 7 de febrero de 2007

Quedó claro que lo mejor era
jugar primero como locatario

La semana pasada, con anticipación, establecimos la necesidad de haber optado por jugar el primer partido en nuestro estadio municipal.
Sin embargo Rivera ganó el sorteo, tuvo la posibilidad de elegir y, por decisión del técnico, nuestro delegado pidió para jugar el primer partido como visitante.
Hoy Rivera está tres puntos abajo y se tiene que jugar la revancha el próximo sábado.
Los gurises celestes están obligados a ganar para llegar a una definición en un tercer encuentro.
Cabe consignar que el gol logrado por Wanderson Silveira no aporta nada desde el punto de vista reglamentario y solamente sirvió para mejorar el ánimo de nuestros jugadores que, en los minutos finales se dieron cuenta que atacando, se puede ganarle a Salto.
Pero lo concreto es que el sábado hay que ganar y nada se habrá ganado más que la posibilidad de una definición en un tercer encuentro.
Reiteramos que el primer partido jugado en casa trasladaba esa responsabilidad a los salteños para el caso que los celestes triunfaran en nuestro medio.

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